Parece que fue
ayer cuando llegamos a Cink Emprende, pero no, ya han pasado seis meses desde
que resultamos uno de
los diez proyectos ganadores de la I Convocatoria de la Aceleradora Social para Emprendedores.
De la emoción
inicial por tener la posibilidad de vivir esta gran oportunidad, hemos pasado a
dedicar muchas horas de trabajo para tratar de arrancar y consolidar nuestros
proyectos. Hemos experimentado el proceso que tiene que pasar cualquier empresa
para salir a la luz; constitución, plan de negocio, probaturas sobre el modelo
de negocio, pacto de socios, selección de personal, plan de marketing y
comunicación, etc. Mucho tiempo dándole vueltas a la cabeza para intentar
conseguir a nuestros primeros clientes.
Una multitud de
desafíos laborales y personales que han resultado más fáciles de llevar gracias
a la gran comunidad que rodea a Cink Emprende. Cada uno con sus ilusiones y retos
propios, pero pensando en lo colectivo. Esta es la realidad del coworking. Un
espacio colaborativo en el que algo que es bueno para tu empresa, lo puede ser
para la que está a tu lado.
En Cink Emprende
hemos aprendido a trabajar de forma autónoma. No es fácil levantarse por las
mañanas y saber manejarse sin un jefe que te diga lo que tienes que hacer, pero
es lo que tienes que aprender a hacer si quieres progresar. Tu sueldo depende
de lo que trabajes y de lo hábil que seas para captar oportunidades de negocio.
Si eres competitivo y listo ahí tienes tu oportunidad.
En cierta manera
estamos aprendiendo a vivir con la incertidumbre. No sé si será bueno o malo,
pero es lo que hay. Hemos intentado abstraernos de la generalizada corriente
negativa que fluye en el ambiente para mirar con optimismo hacia el futuro.
Dicen que la fe mueve montañas. Pues en eso estamos..
Llegan los nuevos
acelerados que nos reemplazarán en Cink Emprende y que seguro sabrán entender
lo que significa este lugar. La semana pasada no pude reprimir una sonrisa de
satisfacción cuando vi sus caras de alegría al resultar vencedores de la 2ª
Convocatoria de la aceleradora. Eché la vista seis meses hacia atrás y me
reflejé en ellos. ¡Qué subidón de adrenalina! Ahora llega su oportunidad.
Gracias a Cink
Emprende, a Raúl del Pozo, a Raúl
García, a Laura por aguantarnos, a los mentores, y en
especial a mis compis acelerados por haberme hecho disfrutar tanto durante
estos seis meses.
* Post compartido con el blog de Cink Emprende