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martes, 19 de julio de 2011

No importa que lo borres, ya todos lo sabemos

El pasado jueves 14 de julio, el senador del PSOE y presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, protagonizó un lamentable incidente en Madrid, junto a su hijo y un amigo de éste, que acabó en detención y con un revuelo mediático a nivel nacional y regional que ha terminado por dañar su imagen política y personal. 

Lo que en un principio tenía pinta de ser una distendida cena entre Curbelo, su hijo y el amigo, terminó por convertirse, según el atestado policial, en una noche llena de destrozos, agresiones, amenazas e insultos, que desde luego no han hecho ningún bien al político canario. La presión sufrida ha motivado su dimisión como senador del PSOE por La Gomera, aunque de momento seguirá ejerciendo como presidente del Cabildo en esa isla.

La dimensión y el alcance que ha tenido la noticia en los medios de comunicación offline y online, así como el gran número de comentarios que están teniendo las noticias relacionadas con este suceso se ha extrapolado a redes sociales como Facebook, donde se ha creado un grupo pidiendo su dimisión.

Sin embargo, lo que más me ha llamado la atención ha sido la total censura que se ha ejercido en el muro del perfil del político en Facebook (lamento no haber hecho un "pantallazo" cuando lo vi para haberlo mostrado de una forma más gráfica). Todos los comentarios que habían sido publicados por ciudadanos disconformes con su comportamiento han sido borrados del muro, para dejar paso a una página "más limpia".


Con motivo de la pasada cita electoral del 22 de mayo, muchos partidos y políticos pensaron en las redes sociales como una oportunidad en el oasis mediático para ganar protagonismo de cara a conseguir un mejor resultado. Sólo veían el lado bueno del Social Media, sin caer en la cuenta que las crisis de reputación online son más comunes de lo que uno se puede pensar.

Pues bien, parece que políticos como Curbelo (o los que le aconsejan) creen que borrando la información van a conseguir disuadir el efecto multiplicador que tienen las redes sociales. Pero esto, por desgracia para ellos y por fortuna para nosotros, no funciona así. La censura no lleva a ningún lado, así que mejor podrían centrar sus esfuerzos en conversar con los ciudadanos y en bajarse del pedestal en el que están subidos.


2 comentarios:

  1. Nota mental, cuando veas una "cagada" en redes sociales, haz siempre un pantallazo ;)

    Por fortuna para nosotros, algún día se darán cuenta de la necesidad de un Community Manager que les asesore.

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  2. No se me volverá a olvidar en la vida.. Aun así muy curioso el caso. Hasta el viernes estaba el muro lleno de comentarios negativos (un día después de toda la movida) y de repente aquí no ha paso nada..

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