¿Cómo podemos construir nuestra propia marca personal?

El entorno profesional tan competitivo en el que estamos inmersos actualmente hace que resulte fundamental intentar destacar por encima del resto. Potenciar la marca personal se ha convertido en un requisito imprescindible tanto a nivel de empresa como individual.

Sobre marketing personal trató la última sesión del curso de Community Managment y Redes Sociales de Inesdi impartida por Mariano Ballesteros, Director de Recursos Humanos de España y Portugal de Europcar IB, quién trató de hacernos ver cómo podemos hacer para que nuestra marca personal mejore.

Marca personal es la síntesis de todas las expectativas, imágenes y percepciones que creas en la mente de los demás cuando ven u oyen tu nombre. Por citar algunos ejemplos conocidos, a Steve Jobs se le asocia con la innovación, a Barack Obama con el cambio y el poder, a Emilio Botín con el éxito y a Rafa Nadal con el esfuerzo y la superación.

Las herramientas 2.0 son un excelente recurso para darte a conocer y mejorar tu marketing personal. Tener un perfil en Facebook, Twitter y Linkedin profesionalizado, escribir en un blog tus pensamientos, participar en foros y comunidades virtuales que te interesen, pueden hacer que la percepción de los demás hacia ti cambie de manera positiva.

Durante la sesión surgió un interesante debate acerca de las diferencias en la marca personal de los trabajadores freelances y de los que lo hacen por cuenta ajena en empresas. La tendencia nos hace pensar que el freelance tiene que cuidar más su marca puesto que él es el que responde personalmente con su trabajo, mientras que el que lo hace por cuenta ajena siempre pone por delante el nombre de la empresa, ya sea para algo negativo o positivo.

En mi opinión, todos deberíamos cuidar y resaltar el marketing personal, independientemente de nuestra situación laboral. Las posibilidades de encontrar una mejora profesional muchas veces viene acompañada de esa marca personal que hayamos sido capaces de construirnos nosotros mismos.

Mariano Ballesteros incidió también en el Modelo ADN de Personal Branding. El ADN se entiende como: A: Análisis, atributos y autenticidad, D: Diferenciación y N: Notoriedad. Dentro de este modelo encontramos tres áreas; control, influencia y preocupación.

La zona de control es en la que nos sentimos cómodos, donde se repiten nuestras rutinas, relaciones, acciones, etc. El reto es salir de esa zona de comfort en la que nos encontramos bien y ampliar nuestro mundo, nuestras miras.

Profesionalmente en cualquier ámbito tenemos que ser capaces de fijarnos un objetivo que sea medible cuantitativamente, porque si no sabes hacia dónde vas, corres el peligro de acabar en cualquier parte.